A PITI GARCIA CASAL

Publicado  13 oct 2009



Hace días este periódico publicaba por capítulos la vida de Jose Antonio García Casal, su vida, sus obras, sus milagros, su ida, su venida, el pasado, el presente y el futuro, de donde viene y a donde va.


Me parecía estar leyendo la vida de la jet-set en algún rincón de la farándula de España. Los que somos de Sotrondio, sabemos perfectamente de donde viene y a donde va cada vecino del pueblo desde los años: 1950 / 1960 / 1970, quien era cada uno con nombre y apellidos, se conocía a la gente por sus defectos, pero también por sus grandes virtudes.

Al final, nos hemos enterado del glamour, "de las flores, del adorno", de lo que cada uno quiere contar de su persona, pero lo más importante, lo relacionado con lo público, con los ciudadanos no se cuenta, nada, no se dice nada, nadie recuerda, nadie aclara. Los asturianos tenemos dudas, tenemos la sensación de que nos tratan como si fuéramos tontos, como animalitos. Pagar y callar.

No se aclaró: aquel follón de dinero por aquella famosa plaza de Asturias en La Habana, Cuba

Tampoco nos informan, todos se olvidan, de contarnos, como un hijo de un personaje del antiguo Sindicato Vertical se coloca con artimañas en el Sespa. No se dice quien llamo a quién para su colocación. No se dice que meritos tienen unos asturianos sobre otros, ¿Por qué? Vamos a tener que pedir que los puestos de trabajo, tan escasos, sean sorteados en público y ante notario, para que prevalezca la justicia, la equidad, se termine de una vez para siempre y para bien de todos los enchufes, los privilegios, las prebendas y pensar que estos señoritos con estos haceres sigan teniendo cargo público o político, y sigan paseando la cartera por los pueblos de Asturias, es una autentica vergüenza, para cualquier español, para cualquier asturiano de bien.

Al grano Piti Casal, ¿qué paso en La Habana?

Concretemos: ¿Cómo se colocan los hijos de los del antiguo Sindicato Vertical?, ¿sabes quién llamo a quién?, ¿sabes de qué hablo?

Piti, sabes que nada tengo contra ti, pero cuando uno sale en los periódicos corre el riesgo de que alguno-@ pida explicaciones.

Los asturiano-@s queremos ver a los políticos trabajar para el bien de todos, somos nosotros-@s las que debemos hablar bien o mal de nuestros representantes.

Buenas noches y buena suerte
Covi Carcedo (Publicado en la Nueva España 10/10/2009).