Como siempre en la vida las subidas cuestan, pero tienen su
encanto, no es para menos esta subida al Real Sitio de Covadonga, donde la niebla
nos hace centrarnos
en el camino a
recorrer, pero cuando llegas al alto casi siempre se puede ver y disfrutar la
belleza que nos ofrece la naturaleza,
el entorno, de este Paraíso Natural: Asturias. Es como la vida misma, lo que cuesta es lo que vale.
Cuando desaparece
la niebla, queda la montaña, el paisaje, la luz y el encanto. Se ven las obras.