ARECES: SUEÑA

LA DERROTA ARECISTA
Por fin, los socialistas de corazón han depositado su voto libre en las urnas.
La lectura es clara, “para mentes cortas”, han perdido en Aviles, Gijón, Siero, Carreño, C.Narcea, Piloña, Valdés, Teverga, feudos totalmente ligados al club de Areces.

Han perdido las elecciones los conversos, los del pesebre, los de la duerna, los del yugo y las fechas y las señoritas de la sección femenina, los de la metamorfosis. Si alguna-o duda de lo que escribo: consulta resultados Elecciones 2003.

Se pierden votos por capricho, por vanidad, por soberbia. Ejemplo mi pueblo Sotrondio, S.M.R.A., se ha perdido “un concejal” por los problemas del Sr. Graciano Torre, con los vecinos de Blimea. A este señor hay que alejarle de la política activa. Los socialistas tienen que dar lecciones de “buen hacer”. Y para colmo tenemos que escuchar de algún indocumentado decir: “tener un concejal menos, es responsabilidad del actual alcalde Ignacio Fernández”; hombre bueno, prudente. serio, capaz y ejemplar. Hay que solucionar los problemas que tiene la gente en Blimea, antes de las elecciones, después de las elecciones, siempre. Los políticos son servidores públicos tienen que dar facilidades, accesos fáciles y rápidos, no tenemos que “ser burros”, las personas somos inteligentes por naturaleza, vamos a servir no a ser señorítos, a que nos sirvan. Para eso tenemos a los de “derechas”.

Resumen: El único responsable de la perdida de la mayoría absoluta en Asturias es: D. Vicente Álvarez Areces, sus Consejeros, Asesores y su sequito, el “Centro de Inteligencia dormida” en Suárez de la Riva. Esperemos no verles más en el próximo Gobierno Regional.

Exigimos un gobierno de hombres y mujeres “socialistas”.

Conclusión: Este es el fruto de tanto escándalo, tanta colocación a dedo, tanto dineros perdonados a terceros, tanta publicidad, tanta dedocracia, tanta subvención, tantos privilegios, tantos mercenarios “asalariados”, este es el final de una “dulce agonía”. Mall, Moll, Mill, club millón, Cajastur, las licencias de obras, obras con media licencia, “a buen atendedor sobran palabras”. Y sobran personas.

Un Ayuntamiento ejemplar: Langreo. Los mineros (sus familias), somos únicos, “socialistas de corazón no de monedero”.